Querido Papá Noel: me llamo Claudia y tengo 6 años. Como no puedo andar, voy en una silla de batería muy chula para que pueda ir a todas partes, como los demás niños. Cuando me enteré que este año venías a pasar las Navidades con nosotros, y que tienes una casita cerca del Castillo donde podemos ir a visitarte, me hizo mucha ilusión y le pedí a mis papás que me llevaran. Nos pusimos a hacer cola, porque había muchos niños esperando. Yo estaba muy nerviosa porque tenía muchas ganas de entregarte mi carta y ver tu casa. Después de mucho rato llegamos hasta la puerta, pero había unos escalones y no podía entrar con mi silla, así que tuve que aparcarla en la puerta y mi mamá me pasó en brazos, ya que me hacía mucha ilusión ver tu casita por dentro. Muchas gracias por salir a recibirme, aunque me hubiera gustado poder entrar yo solita con mi silla y no en brazos de mi madre como si fuera un bebé. Conozco a otros niños que como yo van en silla de ruedas, y también quieren ir a ver tu casa, pero les he dicho que no podemos pasar. Por eso te mando esta carta, porque quiero pedirte un deseo para estas Navidades. Quiero que hables con la alcaldesa, me ha dicho mi mamá que se llama Sonia y es la que más manda en el Ayuntamiento, para que le pidas que pongan una rampa de madera en la puerta y un aparcamiento para que podamos ir a visitarte los niños que no podemos andar. Como sé que tienes mucha magia, espero que consigas que mi deseo y el de otros niños se cumpla. Te mando un besito.